La sonrisa es una línea curva que lo endereza todo y por eso nos preocupamos tanto por cuidar su aspecto y que esta tenga la mejor presencia posible. Una sonrisa cómplice puede ser nuestra mejor aliada en momentos donde no sabemos qué decir o cómo actuar. Este es un motivo de peso para replantearse seriamente el uso de ortodoncia invisible, con el objetivo de gozar de una salud más robusta y una presencia de boca y dientes más llamativa.
Hay muy pocas sonrisas en las que no haya ningún aspecto a pulir estéticamente. La búsqueda de la perfección debe ser una constante si hablamos de salud bucodental y por ello, siempre es conveniente acudir a un profesional para que revise el estado de tu boca y dientes y valore si es conveniente acometer estas “reformas”.
Razones para elegir la ortodoncia invisible por encima de la ortodoncia tradicional
‘La tranquilidad es lo que más se busca’ como decía aquel niño que se hizo famoso en una entrevista mientras se bañaba en una piscina. Y sí, a tranquilidad y a comodidad no hay quien supere a los tratamientos de ortodoncia invisible de Invisalign.
Nadie nota que llevas puestas unas fundas, estas son totalmente invisibles, hasta el punto de que ni tu mismo tienes la sensación de llevarlas. Poder quitártelas en el momento que desees para comer o cualquier otra actividad es otra de las ventajas que agradecerás con respecto a los Brackets. Ni punto de comparación a la hora de morder un bocadillo (quien haya llevado los alambres sabe fielmente a lo que nos referimos)
Olvida los Brackets y pásate a Invisalign
Las ventajas de la ortodoncia invisible son infinitas y entre ellas destaca la tecnología virtual 3D con la que se fabrican, asegurando que los alineadores sean a tu justa medida y se adapten como un guante. Esto es fundamental para cualquier deportista, puesto que mientras practican ejercicio no pueden estar pendiente de la ortodoncia.
Por último, su precio ha descendido en los últimos años y prácticamente no tiene diferencias con la ortodoncia tradicional, siendo este un factor determinante por el cuál lanzarse a adquirir el Invisalign.